Pronto hará un año de la pandemia. Un período en el que se han vivido –y seguimos viviendo- restricciones en la movilidad. Es una situación ante la que muchas personas empiezan a pensar en los viajes que harán cuando se vuelva a la normalidad o, al menos, se permita una mayor movilidad. Y puesta la imaginación a volar, aquí hay algunos destinos de ensueño para perderse y esconderse de todo el mundo.

Los destinos

Uno de los primeros destinos son las Islas Maldivas, que son ideales para vivir una estancia inolvidable en el Océano Índico con unas playas de ensueño. Es decir, que es como estar en el paraíso. De hecho, si se quiere desconectar y no hacer nada o casi nada, ni siquiera se necesita salir de los hoteles-resort.

Otra buena opción son las Azores y, en concreto, la Isla de San Miguel, que es la más grande de este archipiélago. Esta isla es conocida por su paisaje volcánico, lo que no impide que tenga una rica flora y fauna.

También hay una amplia variedad de vida marina como las ballenas, que se pueden observar. Son atractivos a los que se suman sus fumarolas y aguas termales o los lagos gemelos de cráteres, que llaman la atención porque uno es verde y el otro es azul.

azores
Otro paraíso, aunque distinto, es Tanzania con su paisaje y su fauna en la que predominan las cebras y los ñus, pudiendo en muchas ocasiones ver cómo nacen sus crías o los desplazamientos que hacen los animales para buscar comida y agua. Unos atractivos que se viven y disfrutan al bordo de coches 4×4 y durmiendo en las tented camps.

Y, volviendo a destinos de playa, no puede faltar Punta Cana. Durante muchos años ha sido uno de los favoritos para las parejas y los viajes de novios, pero también es una buena opción para personas solteras o viajes en grupo con el fin de descansar en otro entorno que es prácticamente paradisíaco.