Iberostar Hotels & Resorts está de enhorabuena, y es que recientemente ha inaugurado el noveno de sus increíbles establecimientos en el México: el Iberostar Cancún.
A las increíbles características propias de cualquiera de los hoteles de lujo de la cadena debemos sumarle en esta ocasión una ubicación inigualable, y es que no solo se extiende a lo largo de playas de arena blanca y hermosas aguas cristalinas sino que además está rodeado por un verdísimo entorno tropical.
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Este hotel de curiosa arquitectura piramidal parece una moderna adaptación de las tradicionales pirámides mayas que podemos encontrar cerca del mismo, aunque en esta ocasión cuentan con un interiorismo, unos equipamientos y unos servicios que los poderosos de aquella época bien desearían para ellos.
En este sentido, este cinco estrellas no da la posibilidad de vivir unas vacaciones a cuerpo de rey: bajo un régimen todo incluido podrás disfrutar de hasta cinco restaurantes de distintas procedencias y estilos (japonés, mejicano, steak house, buffet o gourmet), de varias piscinas, de un centro de spa (el Initium), de espectáculos durante todo el día en El Telón Teatro y de un montón de actividades para realizar en el hotel (clases de baile, waterpolo, voleibol de playa, baloncesto, arquería, rifle de aire y ping pong).
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Para cuando se acaben las actividades e incluso la fiesta en los bares y discotecas del hotel te espera una elegante y confortable habitación en la que reponer fuerzas: equipadas con todo lo que puedas necesitar para tu comodidad, cada una de 426 estancias del Iberostar Cancún ha sido decorada al detalle con un estilo que se mueve elegante entre lo clásico y lo contemporáneo. La mañana siguiente, nada mejor que despertarse disfrutando de las magníficas vistas al mar que proporcionan muchas de ellas.
Un destino de ensueño, un clima de lo más apacible, un ambiente magnífico y una calidad hotelera fuera de lo común… ¿acaso podrías pedir más para unas perfectas vacaciones de verano?