No necesita ser diez de mayo para pasar un día —o un fin de semana— especial con tu mamá. Dependiendo de sus gustos y de su dinámica, existen varios planes para regalarse un espacio de conexión, ya sea a través de la comida, la relajación, el ecoturismo, o simplemente el paseo y la plática. Los edificios históricos, los paisajes naturales y las artesanías son un gran motor no solo para iniciar la plática, sino también para llenar su viaje de momentos íntimos que ambas recordarán por siempre. Si tú y tu mamá son fanáticas de ‘pueblear’ y ‘chacharear’, estos siete destinos cerca de la CDMX son ideales para recorrerlos juntas.

San Miguel de Allende

La popularidad de este destino en el estado de Guanajuato atrae miles de turistas tanto nacionales como internacionales, y es por ello que fue incorporado al Programa Pueblos Mágicos en 2002, pues es un sitio lleno de folklor mexicano con infinidad de rincones donde admirarse con su patrimonio arquitectónico, acervo artístico, legado cultural y riqueza gastronómica. Este es uno de los pueblos con mayor número de galerías del país, pero sus artesanías las tendrán hipnotizadas por horas. Entre lámparas y corazones de latón, papel amate,vidrio soplado, tapetes, vitrales, muebles y cerámica, San Miguel de Allende te invita a perderte entre sus calles empedradas y encontrar tesoros llenos de historia. No te olvides de visitar el Mercado de Artesanías y terminar en Mercado Centro, el mercado gourmet donde encontrarás los mejores vinos, quesos, café y cerveza artesanal.

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Bernal

Esta escapada madre-hijx asegura una experiencia acogedora, tradicional y colmada de auténtica gastronomía queretana. Su buen clima y las artesanías que inundan sus espacios lo hacen perfecto para recorrer con calma y dejarse sorprender por el patrimonio arquitectónico y artesanal, dentro del cual destacan la antigua técnica de telar que se aprecia en los cojines, rebozos, sarapes y tapetes, así como la joyería de ópalo que abunda al pie de las banquetas. El Centro Artesanal La Aurora es un gran lugar para descubrir todo lo que Bernal tiene que ofrecer.

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Tepoztlán

El espíritu místico y espiritual de este Pueblo Mágico en Morelos se deriva en parte de los impresionantes cerros que lo custodian, proveyendo las caminatas por sus calles empedradas de preciosos panoramas naturales. Si quieres consentir a tu mamá, esta es una excelente opción, pues cuenta con varios hoteles que no solo destacan por su belleza arquitectónica, sino por ofrecer variedad de experiencias terapéuticas. Ahora bien, nada mejor para revivir los días de antaño cuando éramos chiquitxs y paseábamos con nuestras mamás que ‘chacharear’ entre las tiendas y los puestos de artesanías mientras disfrutan una ‘tepoznieve’.

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Malinalco

Este destino es uno de los mejores Pueblos Mágicos que puedes visitar en el Estado de México, con su agradable atmósfera de tradición local abundante en sorprendentes construcciones eclesiásticas, patrimonio arqueológico, recintos culturales, gastronomía regional y experiencias ecoturísticas. El telar de cintura es fundamental dentro de la tradición textil de México, y pueden visitar un taller especializado en su elaboración en Xoxopastli, donde no solo encontrarán los rebozos más bonitos, sino que también aprenderán un poco más sobre su proceso de elaboración y la historia generacional detrás de esta técnica. Asegúrense de llevar zapatos cómodos y estar preparadas para subir por calles empinadas, pues Malinalco está lleno de rincones que no se pueden perder (aunque también está lleno de cafeterías que te invitan a sentarte a descansar largo rato).

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Foto: El Xoxopastli

Taxco

Ubicado en Guerrero y a dos horas y media desde la CDMX, este maravilloso Pueblo Mágico de pasado minero tiene un patrimonio artesanal de fama mundial por sus piezas de plata inspiradas en el barroco colonial y el art noveau. Pasear por sus calles alineadas con pintorescas casonas y enormes centros religiosos es un viaje al pasado que nos recuerdan el esplendor de la región durante la época de la Colonia. Otro elemento de gran demanda es la palma, ya que con ella se realizan bolsas, tapetes, tortilleros y demás artefactos tejidos tanto para uso personal como para decoración de tu hogar. Además, es uno de los destinos culinarios más importantes del país por su consumo de insectos y por el cultivo de ingredientes como la nuez y el piñón rosa.

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Pahuatlán

Este Pueblo Mágico en la Sierra Norte de Puebla está a menos de tres horas de la CDMX y aún conserva tradiciones prehispánicas como la producción de papel amate, cuya fábrica principal se encuentra en San Pablito. Ahí también encontrarán bordados nahuas de gran calidad en distintos formatos, desde blusas y vestidos hasta mantas y cubrecamas. Gracias a sus condiciones climáticas (asegúrense de empacar un impermeable), este pueblo también tiene una gran producción de café de altura perfecto para calentarse después de un día recorriendo sus calles y paisajes naturales.

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Huasca de Ocampo

Este fue uno de los primeros Pueblos Mágicos de México y uno de los más pintorescos y llenos de historia en Hidalgo, el destino perfecto para conocer las ex-haciendas de la zona y maravillarse con los escenarios naturales de la región, como los Prismas Basálticos y el Bosque de los Duendes. Huasca es el lugar ideal para comprar preciosas vajillas de barro, platones, cazuelas, salseras, jarritos y botaneros, pues su tradición artesanal se centra en la alfarería colorada.

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