Hay un lugar, tal vez muy cerca de ti, que te ayudará a encontrar una conexión entre tu cuerpo, alma y mente con la naturaleza. Hace un tiempo que en mi camino se cruzó un spa que llamó mi atención. Y digo que “se cruzó en mi camino” porque durante años suelo caminar por la colonia Condesa en la Ciudad de México con mis perros. En la calle de Ámsterdam, mi favorita, hay un camellón profuso de vegetación que disfruto mucho.
A un lado vi el nombre de de Vitalí Intra Spa y me vibró bien. Desde ese día he estado yendo, primero a tomar masajes, a meditar, a una ceremonia del cacao… y todo me ha encantado. Pero esta vez les quiero compartir una Experiencia-Encuentro a la que me apunté, pues de verdad me sorprendió gratamente.
En la camioneta, me ofrecieron unas gotitas de aromaterapia para seguir abriendo el sentido del olfato y relajarme en el camino.
Experiencia multisensorial
La cita fue a las 4:45 de la madrugada. Como lo lees. No te asustes como yo cuando me dijeron que a esa hora me esperaban. Me dije: “si mis guías me han ayudado tanto, confiaré en ellos para vivir esta Experiencia-Encuentro”. Me recibieron con té calientito y una trufa de cacao, mientras vi que ya iban llegando las otras personas.
Nuestra cita con el sol
Al llegar a Xochimilco, Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, te reciben en la trajinera con un rico café de olla para ir en silencio, disfrutando del amanecer.
Despertar. Consciencia. Sentidos. Cuerpo.
En un claro con verde pasto, sobre una chinampa, y algunas vacas como testigos, comenzaron a resonar tímidamente los tambores que a cada participante nos dieron. Estas vibraciones fueron creciendo poco a poco, despertando junto con nosotros. Fue muy raro porque nos guiaron de tal forma que comenzamos a sentir cierto empoderamiento; cada golpe resonaba también en mis células, hasta que todos juntos -tambores y corazones- se encendieron aún más al presenciar lo que tanto anhelábamos: la salida del sol.
Que las chinampas no mueran
Ya con el sol calentándonos, nos presentaron a las personas de Arca Tierra, una organización que se ha dedicado al loable rescate de las chinampas. A Vitalí Intra Spa le encantó la misión de Arca Tierra, pues ellos buscan la recuperación ecológica y cultural de la zona chinampera de Xochimilco.
Así, sobre la Chinampa del Sol, nos ofrendaron romero recién cosechado para frotarlo entre las manos y sentir su delicioso y fresco aroma. Mientras, nos enseñaron todo sobre las chinampas. Pero esto no se los contaré a fondo para que ustedes lo vivan (guiño).
Un saludo al sol real
Aún estaba extremadamente fresca la mañana, lo cual tu cuerpo agradece pues te hace sentir más vivo, cuando comenzó nuestra clase de yoga (llevé mi mat pues ya sabía de esta clase cuando me apunté). Fue una práctica hermosa multinivel (que todos pueden lograr) y obviamente comenzamos con saludos al sol. Toda la sesión de yoga me ayudó mucho a relajar los músculos, de hecho, aminoró un dolor de espalda que traía clavado de varios días. Todos estábamos dispuestos en círculo alrededor de una mandala de madera, lo cual nos facilitó conectarnos con las otras personas durante la práctica.
Inmediatamente después experimentamos juntos una meditación guiada, sentados directamente en el pasto para conectar con la tierra, sintiendo los rayos de sol en nuestro rostro, con el sonido de cuencos tibetanos que se conjuntaban con los propios de la naturaleza.
Pude captar los despegues de las garzas, por ejemplo. Un deleite sonoro.
Desayuno 100% orgánico
Era hora de activar nuestro sentido del gusto y de qué forma. De inmediato caímos en cuenta que lo que nos dieran, sería producto de las chinampa de Arca Tierra. Comenzamos con una ensalada de mix de lechugas y espinaca, super sencilla, solo aliñada con aceite de olivo y sal para que sintiéramos los sabores de los frescos insumos. Yo me serví doble porción. Seguimos con una gordita de chicharrón, quesadillas de maíz azul, huitlacoche, flor de calabaza y espinacas con jitomate. Agua de jamaica, agua infusionada con romero y unos panquesitos deliciosos hechos ahí mismo en su horno de piedra. Un regalo total.
El regreso
Nos relajamos, subimos a nuestra bella y milenaria embarcación para regresar a la camioneta y más tarde a la colonia Condesa, donde nos despedimos de nuestros facilitadores de Vitalí. Agradecí cada minuto de esta fabulosa experiencia, cambió mi ritmo, mi ánimo, mi conexión con mis raíces, con la tierra, el sol, las aves, el agua. Adoré cada momento y por eso, cada que se pueda regresaré a vivir estas experiencias con Vitalí Intra Spa, quienes me recuerdan que soy parte del todo, soy infinito, Soy Yo.
Si quieres vivir esta y otras Experiencias-Encuentros que organizan cada mes:
Vitalí Intra Spa
- contacto@vitalispa.com.mx
- T. 55 2974 6994.
- Horario 9 a 21 horas.