6 ex-haciendas convertidas en hotel para pasar las vacaciones más románticas

La historia de las haciendas en México es tan variada como los paisajes en los que se encuentran, pero todas comparten una característica innegable: su encanto. Estos magníficos edificios sobreviven hasta hoy, pero esta vez listos para recibir a todos aquellos que deseen pasar unas vacaciones tranquilas, desconectadas de la rutina y muy acogedoras. Aquí te dejamos seis ex-haciendas para darte una escapada romántica.

Hacienda Santa Bárbara

A unas horas de la Ciudad de México, en el municipio de Huamantla, se encuentra la Hacienda Santa Bárbara. Los muros de piedra, adobe y tabique de este imponente edificio colonial no solo te conectarán con el pasado histórico del lugar, sino también con la tierra y el campo. Alejado del bullicio de las grandes ciudades, Santa Bárbara centra su experiencia en las prácticas ancestrales y los productos locales, e incluso cuenta con su propia huerta orgánica para cosechar la materia prima de los platillos de su restaurante. Si quieren pasar un fin de semana romántico lejos de la rutina pero cerca de la ciudad, esta es sin duda una buena opción.

Hotel Hacienda San Gabriel de las Palmas

En 1529, Hernán Cortés ordenó la construcción de un monasterio para la orden franciscana. Años después, los religiosos abandonaron el lugar y el edificio se transformó en el ingenio azucarero más importante durante la colonia. Sus muros fueron testigos de la guerra de independencia, y durante la Revolución Mexicana, se convirtieron en cuartel de los zapatistas. Esta construcción llena de historia hoy es un hotel romántico y acogedor con más de 600 piezas de arte y mobiliario antiguo que harán de tu estancia un evento inolvidable.

La Quinta Luna

Este pequeño hotel boutique de apenas siete habitaciones tiene el ambiente íntimo ideal para unas vacaciones románticas, con su patio central y las increíbles vistas de los volcanes y la Gran Pirámide de Cholula. La Quinta Luna tiene un compromiso con el medio ambiente, por lo que cuenta con paneles solares para generar casi el 100% de su energía eléctrica. El lobby se encuentra en la antigua capilla de la hacienda, y podrás encontrar espacios renovados que ahora albergan un cómodo spa y un restaurante de comida mexicana. La atmósfera se complementa con los conciertos de cámara que ofrecen varias veces al año.

Hacienda Temozón

Este hotel ex-hacienda de lujo se encuentra en la Selva Maya y su arquitectura fusiona elementos de la construcción maya y española de la época de las grandes haciendas henequeneras en Yucatán. La decoración conserva toda la estética original, pero con todas las comodidades modernas para que tu estancia sea de lo más placentera. El restaurante del hotel tiene vista a los magníficos jardines principales, a la alberca y al antiguo edificio de la fábrica, y propone una combinación de cocina regional e internacional para ponerle la cereza al pastel en tu escapada romántica.

Hacienda Uayamón

También en la península de Yucatán, pero esta vez en Campeche, Luxury Collection presenta la ex-hacienda Uayamón. Su construcción data de principios del siglo XVIII, y hasta el día de hoy conserva todo el lujo de la hacienda y la belleza natural de la selva que lo rodea. Nada más romántico que un día en el spa, cuyos tratamientos rescatan elementos de la sabiduría ancestral maya, o para los más aventureros, un paseo nocturno por los jardines privados escuchando el canto de las ranas. Además, podrás descubrir Edzna, un histórico sitio maya dentro del terreno del hotel.

Hacienda San Antonio

Las paredes rosa salmón de la Hacienda San Antonio contrastan con el verde de la vegetación tanto de los patios y corredores interiores como del volcán activo que se extiende ante los ventanales y las terrazas. Definitivamente querrán pasar más de un par de días en este mágico lugar donde se ofrece una amplia variedad de opciones para tener unas vacaciones románticas de lo más activas: vuelo en globo, equitación, paracaidismo y bici de montaña para los más extremos, y clases de ‘wellness’, alberca y jardines para los que buscan un plan más relajado. No te pierdas de una cena más romántica en el restaurante ubicado en el rooftop con vista al volcán, cuyos ingredientes vienen directo de la huerta del mismo hotel.