El Servicio Postal Mexicano (SEPOMEX), mejor conocido como Correos de México, renueva su identidad visual y logotipo. El encargado del diseño fue Carl Forssell, quien buscó conservar algunas de las características del antiguo diseño presentado en 2009.
Los colores que conformarán la nueva iconografía son los mismos: verde limón y rosa mexicano. Asimismo, se incluye una referencia a la paloma mensajera y al sobre con el que estamos familiarizados. El nuevo logotipo e identidad visual del Servicio Postal Mexicano se diseñó en 2019 y entró en vigor este año.
Aunque actualmente no se ha implementado la nueva imagen en camionetas, uniformes y anuncios en las sucursales, el nuevo logotipo ya sustituye al anterior en los medios digitales.
Un poco de historia de Correos de México
El Servicio Postal Mexicano comenzó su historia en 1580, cuando el rey Felipe II creó mediante decreto el “Correo Mayor de Hostas y Postas de la Nueva España”, cuyo hecho fue realizado por Martín de Olivares. El trabajo principal de la oficina era comunicar al virreinato con España. Desde entonces, el servicio postal permaneció en manos de particulares por 187 años.
Con las Reformas Borbónicas, el servicio de correo pasó a manos de la Corona Española. Don Antonio Méndez Prieto y Fernández, último Correo Mayor, entregó el oficio al Estado en 1766.
En 1901 el Correo adquirió el rango de Dirección General de Correos y seis años más tarde Porfirio Díaz inauguró el Palacio Postal. Para 1933 se unificó el servicio de telégrafos y correos en la Dirección General de Correos y Telégrafos. Durante el sexenio de Manuel Ávila Camacho ambos servicios volvieron a ser entidades separadas.
En 1986 se creó mediante decreto el Servicio Postal Mexicano, con lo que se le dotó de autonomía y se inició un proceso de modernización. Esto fue una respuesta a la necesidad de mejorar el servicio, ya que era acusado de precariedad. Desde 2008 adquirió el nombre de Correos de México.